El gobierno de Estados Unidos está evaluando la posibilidad de imponer restricciones o prohibiciones a los drones fabricados en China, citando preocupaciones de seguridad nacional. Según informes recientes, el Departamento de Comercio ha iniciado una consulta pública para recibir comentarios sobre posibles regulaciones destinadas a proteger la cadena de suministro de drones. Así lo señaló AP News, indicando que el Departamento de Comercio ha señalado que adversarios extranjeros, especialmente China y Rusia, podrían explotar vulnerabilidades en la tecnología de drones para acceder o manipular datos sensibles de EE. UU.
El Departamento de Comercio ha señalado que la participación de adversarios extranjeros en el diseño, desarrollo, fabricación y suministro de drones podría representar un “riesgo indebido o inaceptable para la seguridad nacional de EE. UU.”. Los drones chinos, que dominan el mercado global, podrían ser utilizados para recopilar datos sobre infraestructura crítica, realizar espionaje cibernético o incluso ser manipulados remotamente para causar daños físicos, según lo reportado por AP News.
DJI, la marca de drones chinos más conocida, tiene la mayor cuota de mercado global y es un jugador dominante en el mercado de EE. UU. Sus drones son utilizados por primeros respondedores para localizar víctimas de desastres, cartógrafos para mapear carreteras y líneas de utilidad, oficiales de control de mosquitos para alcanzar enjambres de larvas y cineastas para capturar imágenes aéreas. Sin embargo, la relación entre EE. UU. y China se ha deteriorado, y los drones de DJI han sido objeto de escrutinio. Así lo señaló AP News, informando que el gobierno de EE. UU. ha incluido a la empresa en varias listas negras por preocupaciones sobre la seguridad de los datos y presuntos vínculos con el ejército chino.
En respuesta a las posibles restricciones, la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Mao Ning, acusó a EE. UU. de “generalizar el concepto de seguridad nacional, interferir y restringir intercambios económicos y comerciales normales y socavar la seguridad y estabilidad de las cadenas de producción y suministro globales”. China ha afirmado que tomará “todas las medidas necesarias” para proteger sus derechos e intereses legítimos, según lo señaló AP News.
Las restricciones propuestas podrían tener un impacto significativo en el mercado de drones, donde las empresas chinas tienen una cuota de mercado del 75% en EE. UU. Si se implementan, las nuevas regulaciones podrían exacerbar las tensiones comerciales entre EE. UU. y China, afectando industrias que dependen de tecnologías de drones asequibles y avanzadas. Mientras el mercado global se prepara para posibles cambios, ambas partes parecen no estar dispuestas a retroceder, lo que podría desencadenar un nuevo capítulo en su rivalidad económica, según lo reportó AP News.